La vitamina A es una vitamina liposoluble (soluble en grasa) que cumple funciones imprescindibles en nuestro organismo y cuya carencia puede llevar a desordenes funcionales relacionados con la visión, renovación celular, sequedad en mucosas o inmunidad.
La vitamina A la podemos encontrar en forma de esteres de retinil o retinol, en alimentos animales (huevo, carne, hígado, pescados, en la grasa de los lácteos) o en forma de carotenoides, en alimentos vegetales (calabaza, naranja, boniato, zanahoria...)
No tiene por qué haber un déficit de esta vitamina, si nuestra alimentación está basada en productos frescos y nutritivos tales como carne, pescado, huevos... verduras, hortalizas y grasas de calidad, pero el problema de hoy en día es que, muchas veces basamos esa alimentación en productos ultraprocesados, bollería y harinas refinadas, sin tener en cuenta lo que realmente necesita nuestro organismo, nutrientes! (si aún no tienes mi PDF de como llenar tu plato de alimentos nutritivos, pincha aquí)
Y muchas veces nos empeñamos en limitar el consumo de grasas, por ejemplo, compramos leche o yogures desnatados pensando que así son más sanos, pero nos equivocamos, al quitarle la grasa le quitamos también el aporte de las vitaminas liposolubles como la vit. A o D y además suelen llevar más azúcares.
Si compras leche semi o desnatada que sea reforzada en vitamina A, D y E, Ok? No en calcio ya que este no varía aunque quiten la grasa. Pero si lo absorberàs peor si tu aporte de vitaminas liposolubles es baja.
Otra cosa que hay que tener en cuenta es, que los carotenoides (vegetales) son menos biodisponibles que los ésteres de retinil en alimentos animales ya que no se absorben directamente, tienen que ser transformados en retinol en el intestino por medio de una enzima (BCMo1) y muchas veces esta transformación está disminuida por déficit de hierro ya que la enzima es hierro dependiente o en personas con hipotiroidismo o en personas con problemas intestinales.
Por tanto, las personas veganas que no consuman ningún alimento de origen animal, tienen que estar muy pendientes de obtener y maximizar la absorción de estos carotenoides en los vegetales.
¿Cómo aumentamos su absorción? Triturando y cociendo estos alimentos, además de incorporando fuentes grasas como aceite de oliva, aguacate... te lo explico aquí, descubrirás también una receta rica, rica.
Se recomienda una ingesta de 10.000mcg y 21.000mcg de vitamina A a la semana.
La vitamina A es un regulador de los genes ya que tiene receptores nucleares y por tanto tiene un papel crucial en la regulación, diferenciación, desarrollo y maduración de un montón de células en el organismo.
Entre sus funciones destacan:
-El buen funcionamiento del sistema ocular
-Renovación celular manteniendo la piel sana y bonita. Ayuda a la cicatrización
-Mantiene hidratadas las mucosas internas de la nariz, garganta, sistema digestivo y vagina.
-Ayuda en la producción y desarrollo de células del sistema inmunológico
-Activa los receptores de la hormona tiroidea en las células diana, mejorando su acción y disminuyendo los síntomas típicos del hipotiroidismo.
-Desarrollo prenatal y postnatal
-Producción de glóbulos rojos
Descubre más funciones, carencias, equivalencias e interacciones de algunos nutrientes con la vitamina A pinchando aquí
Te dejo un artículo de Pau Oller aquí super interesante y de donde he sacado las fotos de las ingestas de alimentos con vitamina A y la información para realizar este post 😉.
Así que ya lo sabes, si quieres tener un sistema inmunológico a tope, tener una piel bonita, gozar de una buena visión y reducir los síntomas del hipotiroidismo, no te olvides de esta vitamina.
No hay comentarios:
Publicar un comentario